La obesidad se está convirtiendo en una epidemia mundial tanto en niños como en adultos. Se asocia a numerosos riesgos para la salud que aumentan el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares (enfermedad coronaria e ictus).
La obesidad y el sobrepeso también están relacionados con la hipertensión y un mayor riesgo de insuficiencia cardiaca.
Además, el sobrepeso y la obesidad pueden estar relacionados con algunos tipos de cáncer, enfermedades de la vesícula biliar, diabetes y artrosis.
Para determinar si tu peso está relacionado con un mayor riesgo de cardiopatía, se utilizan dos mediciones:
- Índice de masa corporal (IMC): las personas con sobrepeso (IMC 25,0-29,9) u obesas (IMC 30,0 o superior) tienen mayor riesgo de padecer ECV.
- Perímetro de la cintura: el riesgo aumenta si la cintura mide más de 101 cm en los hombres y más de 89 cm en las mujeres.
La pérdida de peso puede hacer maravillas por tu salud cardiovascular. También puede ayudarte a evitar las enfermedades más asociadas al sobrepeso, que suelen aumentar el riesgo de cardiopatía.
Sin embargo, perder peso demasiado rápido puede ser peligroso. Si te impacientas e intentas perder peso demasiado deprisa, puedes privar a tu organismo de los nutrientes esenciales que necesita para funcionar. Algunas dietas líquidas y las que limitan la ingesta de calorías hasta el punto de hacer pasar hambre son extremadamente peligrosas. Una nutrición deficiente puede provocar muchos problemas de salud, como arritmias, pérdida de masa muscular cardíaca y, en última instancia, daños en el corazón.
Estos efectos negativos de la pérdida de peso pueden prevenirse con una dieta equilibrada y una rutina de ejercicio adecuada.
Consejos de nutrición:
- Come una amplia variedad de alimentos que no estén procesados ni sean ricos en sodio o grasas trans.
- Elige frutas y verduras, carnes magras y pescado, cereales integrales y productos lácteos bajos en grasa.
- Aprende a leer las etiquetas nutricionales cuando compres alimentos.
- Busca altos niveles de fibra y bajos niveles de grasa, azúcar y carbohidratos procesados.
- Cocina en casa siempre que sea posible para garantizar un plan de comidas lo más sano posible.